No me digan ustedes en dónde están mis ojos,
pregunten hacia dónde va mi corazón. Jaime Sabines

martes, 28 de diciembre de 2010

Dos lugares distintos, una sola mirada



















Dos lugares distintos y una sola mirada,
Gente y gente pasa pero nunca pasa nada.
Nos miramos, te conservo sin ninguna palabra.
Dos segundos dura el amor, dura nuestra mirada.

Ya no me miras pero yo te sigo observando.
Quizás notes en tu pelo, en tu nuca mi figura,
Quizás sientas frío ya que te esté desnudando,
Quizás sientas calor cuando bese tu cintura.

Ojala que todo esto fuera cierto, real fuera,
Y que no viva de una mirada inoportuna,
Que sean míos esos ojos que tiernos eran
Provocando en mí un arrebato de locura.

domingo, 26 de diciembre de 2010

Cuerpo de fotografía

Un rectángulo de papel mojado
Pende el hilo que hay entre tus caderas.
Corazón del revés, gran sonrojado
Que espero con ansia en ansiada pena.
Desnudo miembro, pequeño agarrado
Sobre el labio de sexo morena.
Indiferente, orden y serie al día,
De ansiado cuerpo de fotografía.

lunes, 20 de diciembre de 2010

Mar en carne viva

El dolor que se somete
Se hace fuerte, limpio y duradero.
Más limpio y amargo mi palabra;
Más duradero y lejano tu beso.
Eres mi agua de mar salada
Que se derrama por mi herida.
Un agua que por fría se oxida
Para limpiar el dolor de tus palabras.
Quisiera bañarme en tu mar
En carne viva,
Tu dolor por todas partes sentir
Y no gemir pequeño grito.
Quisiera llorar tu llanto perdido,
Llanto que lloro por beso mordido,
Y beso que beso por mordido llanto.
¡Algún día seré solo gota,
Gota de amor por tus ojos,
Gota de amor por tu boca,
Gota sucia, gota de espanto!

sábado, 18 de diciembre de 2010

Hoy

Hoy es un día perfecto,
De esos para sangrar y escribir
Sangre desconocida
Como desconocidas palabras tengo.
Hoy es perfecto porque llueve.
Hoy es perfecto por nada.

Mientras unos lloran como hoy,
Lágrimas falsas de agua salada;
Otros ríen sin risa, ríen porque les dan la gana.
Este no es un mundo de risas.
No es mundo. No es nada.

Lloremos todos porque la muerte viene.
Acecha loca y perdida,
Como la vida en sus vaivenes
Dispuesta a cambiar el rumbo del olvido.

Olvidemos todos porque el olvido viene.
La muerte consigo la muerte,
Y el olvido todo lo que no nos acordemos.
Es mi sangre el olvido. Es mi sangre la que olvida.
Me obliga a no vivir a lo que otros tienen por vivido.

Vivamos todos porque la vida viene,
Agarrada por un bastón de olvido.

lunes, 22 de noviembre de 2010

Jarra y vino


















Mientras todos beben
Jarra y vino de besos,
Yo solo lleno de pena
Mi cuerpo.
Todos ríen
Y la felicidad rebosa en sus risas,
Aunque la pena les maten por dentro.

Por dentro lo llevan,
Camuflados con la mísera
Y desafortunada fortuna.
De una en una lamentan 
Por dentro,
Las pocas ansias de vivir
Una vida alguna.

Alguna vez,
En algún momento,
Todos quisieron vivir.
Alguna vez,
En algún recuerdo,
Todos quisieron morir
Sin saber que ya estaban muertos.

miércoles, 17 de noviembre de 2010

No, cariño.

No te pido que me robes la luna
Para que pueda dormir dentro.
Prefiero verla así, desde lejos.
Quieta, limpia y sola.
Me es bonita contemplarla
Mientras descansa este cuerpo
Cansado de ruidos de cama.
Unos ruidos que solo tú y yo
(Y nuestros vecinos)
Perfectamente conocemos.

No te pido que desayunes conmigo,
Y me pases las hojas del periódico.
Ni te pido, pero si quiero,
Que me bajes la bragueta
Para que pueda orinar tranquilo.
No quiero que mastiques por mí,
Ni embriagues mi garganta
Con cualquier bebida barata.
Ni siquiera que te toques por mí,
Ni que me toque por ti, Cariño.

No robes el sol, ni mates otro sol
Si otro sol se fija en mí.
Solo necesito que seas mi corazón,
En este poco latir que tengo, Cariño.

jueves, 11 de noviembre de 2010

Mi fusilamiento


Los cuatro vientos helados
De odio cargan en mi pecho.
Cuatro balas de hojalata
Muestran mi fusilamiento.

Ellos se preparan. Guiñan
El ojo. Apuntan mi cuerpo.
Blanco fácil de ojos verdes.
He aquí mi fusilamiento.

Manos atadas, rebeldes.
 Lujurias de sentimientos.
Mi boca está mordida,
Lengua sin arrepentimientos.

Uno a uno prepara
Mi muerte. Desean mi entierro.
Cargan sus altos fusiles,
Cuatro diablos de ojos negros.

Apuntan a mi cabeza,
Soledad de gatillo sediento.
Ojos verdes, blanco perfecto.
He aquí mi fusilamiento.