Me he perdido y estoy perdiendo
De ti lo mejor de ti.
No he visto de ti tus primeros soles,
Ni de ti tus últimas lágrimas de lluvia,
Que en abril serán las primeras,
Como siempre.
No estoy viendo, ni admiro
Y solo recuerdo con congoja y nostalgia
Esa mi ciudad perdida,
Que existe
(Lo sé)
Pero ruiseñora, viva y alegre
En mis ojos.
Yo sé que estás ahí
(Lo sé)
Cuando amanece este sol
Que dicen que es como el tuyo,
Que se parece al tuyo,
Pero no es el tuyo.
Envidio tantas veces a este Sol.
Es la única que te puede ver,
Besarte como yo lo hacía.
Es la única quien te da esos buenos días
Mientras que a mi ya me da la buonasera.
Yo aquí estoy bien. No te preocupes por mí.
No me falta comida, ni amor ni sexo
(Lo necesario para un hombre, muchacha).
Tengo en mis manos algo que es tan mío como tuyo.
Solo con verla me recuerda de donde venimos.
Me recuerda a ti, muchacha.
Sus grandes ojos, su cabello negro y su acento
No pueden venir de otro sitio que de tus entrañas.
De todos modos, y como sabrás
(Que lo sabes)
Yo te necesito otra vez,
Una vez más perderme por tus calles.
Aunque sea por una semana.
Ya no me sirve imaginarte
Tan simplemente desnuda para mí,
Para mamar de tu pezón
Tu gracia, tu viveza y tu sonrisa.
Tan simplemente vestida para mí,
Para bailar contigo
En tu viveza, en tu sonrisa y en tu gracia.
Después de esto,
Ríete de mí, muchacha, si quieres;
Que yo me río contigo porque te quiero.
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